BELO HORIZONTE.- La Selección no levanta cabeza y esta vez sufrió un duro cachetazo frente a Brasil, que se floreó y le hizo precio con el 3 a 0 final, por la undécima fecha de las eliminatorias sudamericanas. El equipo de Edgardo Bauza jugó el peor partido del certamen y hasta el momento se está quedando afuera del Mundial de Rusia 2018.
Philippe Coutinho, Neymar y Paulinho marcaron los goles del pentacampeón, que con esta victoria se afianzó como líder indiscutido y consiguió su quinta victoria consecutiva.
El camino de la Argentina en las eliminatorias encuentra obstáculos cada vez más grandes debido a un rendimiento flojo, colectivo e individual.
El seleccionado argentino fue un equipo superado en la cancha, apático, sin resolución y sin ideas. Esta claro que es Messi-dependiente, pero esta vez en el crack rosarino tampoco encontró la solución, porque si se compara a las dos grandes estrellas de la noche, Neymar le sacó una enorme distancia. El astro brasileño tuvo socios en la cancha, y la “Pulga”, más allá de su actuación decepcionante, cuando levantó la cabeza no encontró a ningún compañero.
El clásico arrancó de forma pareja. Argentina controló mejor la pelota, pero Brasil buscó con éxito la velocidad para llegar al arco de Sergio Romero, un nuevo recurso del entrenador Tite, defensor de un fútbol ofensivo y dinámico.
Muy poco
El equipo de Edgardo Bauza, en la húmeda noche de Belo Horizonte, intentó ser protagonista, con el auxilio de Enzo Pérez y Javier Mascherano para equilibrar la mitad de la cancha, pero la intención duró unos minutos y solo le generó peligró al rival con un disparo de media distancia de Lucas Biglia, que Ángel Di María no llegó al rebote.
Un minuto después, sin embargo, Coutinho abrió el marcador con un bombazo cruzado desde la izquierda, tras entrar en diagonal y recibir un pase de Neymar.
Argentina aumentó la presión después, pero Brasil siguió explotando la velocidad para llegar con peligro. Messi tuvo un tiro libre desde el borde del área que estrelló en la barrera a los 36’, pero casi inmediatamente después Neymar respondió con una sensacional llegada al arco “albiceleste”, que pegó en el palo.
El segundo gol llegó en la siguiente jugada. Un contragolpe iniciado por Gabriel Jesús, dejó mano a mano a “Ney” con Romero. El crack del Barcelona no falló. Este gol fue un baldazo de agua fría, porque fue justo antes del descanso.
En el complemento, Bauza marcó a la cancha a Sergio Agüero en reemplazo de Enzo Pérez para reforzar el ataque. Los “albicelestes” se adueñaron de la pelota en los primeros minutos, pero la “levantada” duró muy poco. La táctica, sin embargo, no funcionó. Argentina profundizó su desequilibrio y recibió el siguiente golpe cuando la defensa no supo sacar la pelota y Paulinho llegó desde atrás para mandar el balón al fondo del arco.
Los brasileños desperdiciaron en los últimos minutos varias ocasiones de aumentar el marcador, con veloces incursiones hasta la línea de fondo de Neymar, que anoche fue el mejor “10” sobre el césped. Neymar, que no había conseguido marcar nunca un gol jugando contra un equipo de Messi, se sacó la espina en su duelo personal con su amigo y compañero en el Barcelona, y dejó el balance de los cruces individuales entre ambos en 3-2, aún a favor del crack rosarino.
El final fue triste para el seleccionado de Bauza que escuchó el “Oleeeeé” de la multitud que se dio cita en el Mineirao en una goleada que parece haber cicatrizado la gran herida del 7 a 1 ante Alemania en el último campeonato del mundo. Esta vez, Argentina bailó al ritmo de Brasil y continúa en caída libre. (Especial-DPA y DyN)